Con cáncer elige bien la forma de hacer cardio y su dosis, es decir la cantidad e intensidad. Para ello es fundamental que el programa de ejercicio esté supervisado adecuadamente, de forma que se tengan en cuenta todas las posibles circunstancias: la enfermedad, el tratamiento y las particularidades de cada persona concreta.
El cardio es imprescindible para las personas que tienen o han tenido cáncer. Este tipo de ejercicio reduce el riesgo de accidentes cardiovasculares graves, disminuye la fatiga y te ayuda a tener más energía. Por ello, el entrenamiento cardiovascular permite a las personas con cáncer tener más salud, más autonomía y vivir mejor. Visita estas otras entradas, si quieres conocer más sobre qué es el cardio y sus posibles beneficios.
El entrenamiento cardiovascular puede hacerse con algún tipo de aparato, como por ejemplo bicicleta estática, cinta de correr, elíptica, escalón, etc… o sin material, por ejemplo corriendo. Sea como sea, es muy importante que sepas que es fundamental que lo hagas, independientemente de tu experiencia o del miedo que puedas tener tu, tus familiares o tu propio médico. Existe mucha desinformación respecto a este tipo de ejercicio y muchas veces las personas que mas nos quieren nos lo desaconsejan por un miedo irreal, que nada tiene que ver con la realidad y lo que dice la ciencia.
Andar tranquilamente no es hacer cardio. Para que el entrenamiento cardiovascular consiga los objetivos propuestos, debemos alcanzar cierto nivel de estímulo. No es lo mismo 10 minutos que 30. Es importante saber si se hace de manera continua o en series y no da igual el esfuerzo que te suponga. Para conseguir los beneficios necesitas llevar a cabo una dosis de entrenamiento que tenga en cuenta la intensidad y la duración adecuada. Si no es así, estarás perdiendo el tiempo y en muchos casos poniendo en riesgo tu salud.
Además de la dosis, es muy importante elegir bien el medio. No solo hay que tener en cuenta tus gustos personales, sino también las diferencias entre unas formas de hacer cardio y otras. Por ejemplo, puede que te guste la bicicleta, pero debes saber que la postura puede ser agresiva para tu espalda. A mucha gente le gusta correr en la cinta o en el exterior. En este caso debes saber que correr supone un impacto muy importante sobre tus tobillos, rodillas, caderas y sobre la columna. No hay una forma mejor que otra, solo hay que saber elegir la adecuada.
Un profesional del ejercicio conoce perfectamente todas las formas de hacer cardio, y como cada una de ellas puede ayudarte a estar mejor en función de tu nivel inicial, los objetivos planteados y todas tus posibles circunstancias.
Por lo tanto, es muy importante que sepas que:
- Con cáncer elige bien la forma de hacer cardio y su dosis, teniendo en cuenta todas tus circunstancias
- Un programa de entrenamiento te ayudará a estar mejor, sin duda
- Un buen programa de entrenamiento debe incluir ejercicio cardiovascular, ejercicio de fuerza y para la mejora de la funcionalidad general
- Para conseguir los beneficios hay que organizar bien la intensidad y la duración del esfuerzo
- No tengas miedo a hacer cardio, infórmate y busca a los mejores profesionales que te enseñen como hacerlo